Manuel Bartlett Díaz, Director General de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), informó que han implementado de manera efectiva las medidas para rescatar el sector energético del país.
Bartlett Díaz informó que el jefe del Ejecutivo le encomendó dos cosas; primero, rescatar a la CFE, y en segundo, generar energía. Recordó que en los años anteriores, la CFE fue limitando su generación a partir de las decisiones regulatorias, donde la empresa tenía que comprarles energía a los generadores privados.
Reiteró que el presidente también le ordenó detener el declive generado por la Reforma Energética y por las regulaciones que limitaban a la empresa en todas sus actividades:
“Por instrucciones del Presidente se estableció públicamente que la CFE debe seguir generando el 54% de la energía eléctrica, mientras que el sector privado el 46% restante. Lo anterior para tener un equilibrio ante la generación de carácter pública y privada”, resaltó Bartlett Díaz.
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Destacó que bajo ningún pretexto la tarifa de electricidad debe de subir más allá de la inflación, esto como una indicación fundamental del Presidente y de enorme importancia para la CFE. Agregó que se debe mantener estable la tarifa para todo el país.
Mencionó que en 2019 se han desarrollado 11 centrales que se adicionarán al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) con una capacidad de generación de 6,544 Megawatts (MW). De las cuales ya entraron en operación cinco con 3,331 MW y se concluirán seis centrales con 3,213 MW durante el primer semestre del 2020.
En una primera etapa, la CFE convocará para desarrollar siete nuevas centrales con una capacidad total de generación de 3,762 MW, que iniciarán su construcción a lo largo del 2020, para las que se requiere una inversión estimada de 58,634 millones de pesos.
“Seis emplearán gas natural como combustible y solo una, “CI Baja California Sur VI”, iniciará operación con combustóleo, para cambiar a gas natural en el mediano plazo”, explicó.
El Director General resaltó las estrategias para incrementar la generación que permita garantizar el suministro eléctrico en las penínsulas; en Baja California se instalarán dos centrales de generación para operar con combustóleo, diésel o gas natural, con lo cual se incrementará una capacidad de generación de 268 MW.
