El accidente de ayer en la refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Minatitlán, Veracruz, se suma a una larga lista de percances registrados este siglo en otras refinerías e instalaciones.
Hasta el momento el incidente ha dejado un saldo preliminar de 7 heridos. Pero, ¿porqué se registran incendios y otros siniestros que ponen en peligro la vida de los trabajadores mexicanos en esas instalaciones?
Antigüedad, un factor
De acuerdo con las cifras, las refinerías en México tienen una edad aproximada entre 41 y 90 años; esta antigüedad tiene aparejada consigo un nivel de riesgo elevado.
Desde luego, siempre está presente en los alrededores de estas instalaciones los riesgos inmediatos o diferidos, para el personal, la población, el medio ambiente, y la propia instalación y producción.
Algunos accidentes recientes y otros no tanto
Además de la explosión de ayer en la refinería de Minatitlán, se han registrado accidentes relativamente recientes.
Por ejemplo, el 23 de Julio del 2019 en la refinería Ingeniero Antonio M. Amor, ubicada en Salamanca, Guanajuato, se produjo una nube amarilla tóxica surgiendo de dicha refinería. Los trabajadores de esta instalación anunciaron que fue por falta de mantenimiento a los equipos y líneas.
El 12 de enero de 2017 un accidente en la refinería de Pemex de Ciudad Madero, Tamaulipas, dejó un muerto.
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Pero no podemos olvidar el accidente que ocurrió, supuestamente por un error humano en instalaciones de San Juanico, en el Estado de México en 1984, el cual tuvo 500 muertos reportados
Con varios accidentes en instalaciones energéticas, se pensó en la necesidad de un organismo regulador.
Es así como nace la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente, que nace en el año 2015 por la reforma energética y toma el rol de ser la que regula y supervisa las instalaciones del sector de hidrocarburos en seguridad industrial, operativa y protección al medio ambiente.
