Rusia considera que por ahora es imposible evaluar con precisión el impacto del nuevo coronavirus en el mercado energético mundial.
El país europeo analiza la recomendación del comité técnico de la coalición OPEP+ de aplicar un nuevo recorte a la producción mundial de crudo.
Rusia, uno de los mayores productores de crudo del mundo, buscar un «enfoque equilibrado» basado en el interés de la industria en su conjunto.
«Rusia está vigilando de cerca el impacto de la propagación del coronavirus en los mercados mundiales de energía. La situación sigue siendo extremadamente incierta», señaló el ministro ruso de Energía, Alexander Novak, según la agencia oficial TASS.
Novak subrayó la «importancia y relevancia» del trabajo que hace el comité técnico de la OPEP+, para garantizar la estabilidad del mercado.
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La OPEP+ está compuesta por los diez socios de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Rusia y otros nueve productores aliados.
“Ahora Rusia está cuidadosamente estudiando la recomendación del comité técnico para evaluar la situación y determinar un enfoque equilibrado basado en el interés del mercado en general», reiteró.
El comité técnico de OPEP+ recomendó la semana pasada recortes adicionales de producción durante el segundo trimestre del año. La sugerencia es de un recorte de 600 mil barriles diarios, pero Rusia no apoyó la propuesta y pidió unos días para proseguir con las consultas.
Ayer el precio del crudo WTI retomó su tendencia negativa y cerró por debajo de la marca psicológica de los 50 dólares; su precio más bajo desde el 7 de enero de 2019.
Las expectativas de una menor demanda de hidrocarburos en China como consecuencia de coronavirus está derrumbando a los precios del petróleo en los mercados internacionales. El gigante asiático es el mayor importador de hidrocarburos del mundo.
Las cotizaciones del petróleo se han desplomado 25% desde sus máximos del año, después de que la menor demanda desde China hace suponer que el mercado está sobreabastecido.
