Toda crisis es una oportunidad. Y en México, la marina mercante representa muchas oportunidades a pesar de la crisis de salud internacional cuyo tramo por recorrer aún es considerable; de acuerdo con César Vera, Director Comercial de Naviera integral.
“La marina mercante en México ha venido siendo un orgullo, y el reforzamiento de los aspectos nacionalistas que generan solidez a la industria y su crecimiento sostenido y sustentable, va a continuar. No lo veo como un tema de proteccionismo que puede ocasionar algún tipo de retraso tecnológico-regulatorio como ha ocurrido en otras naciones; sino más bien como un incentivador del mismo, somos muy positivos a ese aspecto”, comenta.
Desde hace más de 30 años, la empresa mexicana ha estado sirviendo al sector petróleo y gas con embarcaciones tipo abastecedor rápido para el transporte de personal y materiales ligeros a las plataformas e instalaciones marinas. A pesar de los retos, Vera está convencido de que el sustento de una logística marina eficiente puede contribuir más que nunca a la industria petrolera de México.
“Hoy más que nunca es momento de unir esfuerzos. Debemos trabajar en alianzas que permitan en un futuro cercano exponenciar las utilidades del negocio para todos y forjar esquemas de inversión que beneficien tanto a las finanzas públicas muy importantes, como a las privadas, es decir un balance”.
Innovación tecnológica
Con una flota de 37 embarcaciones propias incluyendo barcos convencionales, así como PSVs, FSVs y crewboats, Naviera Integral le apuesta a la innovación tecnológica, disrumpiendo positivamente el mercado de la logística marítima. LEONARDO, la última incorporación a la flota de la compañía, se trata de un DP2-FiFi1 de la compañía holandesa Damen; el cual cuenta con un diseño característico conocido como hacha y tecnología de “barco conectado”.
El FSV cuenta con asientos tipo business class, pantallas interactivas con infoentretenimiento, barra de cafetería, camarote de enfermería con un médico urgenciólogo a bordo y un giroscopio estabilizador. “Es algo que es único hasta hoy día en México; ya que esto asegura el confort de sus pasajeros aún en condiciones climáticas adversas; además de mejorar las condiciones de seguridad para el traslado del personal hacia la plataforma”.
Al utilizarse como medio principal de transporte de pasajeros y de materiales cuando no se transporta personal, Vera puntualiza la reducción en el costo de vuelos por helicópteros en aguas profundas; lo que significa una mayor eficiencia en el movimiento de los materiales a la plataforma y reducción significativa de costos.
“La embarcación tiene un consumo de diésel de un 30% menor respecto a embarcaciones similares en el mercado; y todo esto trae acompañado nuestro objetivo que es ya reconocido y que hemos cumplido de eficiencia operativa; ¿qué significa esto? Pues que le generamos al cliente cero tiempos muertos por temas de mantenimiento; lo cual ayuda indiscutiblemente a la mejora operativa de nuestros clientes”, explica Vera.
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Con el propósito de mantenerse alineados a los “objetivos verdes”, el especialista en marina mercante destaca la evaluación periódica de proyectos de adopción de energías renovables; como la evolución hacia motores eléctricos y combustibles alternativos. Su misión es alcanzar un balance congruente, innovador y de valor que les permita tener por un lado la misma eficiencia en la capacidad de embarcaciones; y por otro, reducir la huella de carbono a través de alternativas y tecnología que no genere otros temas alternativos.
“Es un momento muy interesante para México en el sentido de alcanzar este balance privado-público que permita la correcta; eficiente, consciente y sustentable producción de hidrocarburos; y de encontrar ese punto de convergencia en donde no haya sustituciones de energías; haya balances de energías y ello mismo conlleve al crecimiento completo del país”, concluye.