Fermaca reanudó las operaciones del gasoducto Laguna-Aguascalientes, las cuales se habían suspendido. Tras meses de negociaciones, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) anunció en septiembre el fin del conflicto con Fermaca. Por esto, ambas partes alcanzaron un acuerdo en las tarifas para transportar el gas natural de Estados Unidos a México.
En este contexto, el gasoducto La Laguna-Aguascalientes posee una longitud de 453 kilómetros y tiene una capacidad para transportar 1,319 millones de pies cúbicos de gas diariamente. Con un diseño en 48 pulgadas, es el de mayor diámetro que se ha construido en el país desde la década de los 70.
Dicho gasoducto cuenta con 13 válvulas totalmente operadas a control remoto y con una estación de compresión con 27,600 caballos de fuerza; también, recorre 25 municipios de los estados de Durango, Zacatecas y Aguascalientes. Además, comprende más de 240,000 toneladas de tubería de acero de alta especificación. Éstas se adquirieron en su totalidad en México.
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Igualmente, La Laguna-Aguascalientes se interconecta al norte con el gasoducto El Encino-La Laguna y al sur con el -Villa de Reyes-Aguascalientes-Guadalajara, ambos propiedad de Fermaca.
Para su construcción, Fermaca invirtió 14 mil 361 millones de pesos, cifra que representa sólo una parte de la inversión realizada. El sistema es denominado Wahalajara y proviene del oeste de Texas con terminación en la zona metropolitana de Guadalajara.
Así, tras meses de negociaciones, el 11 de septiembre, CFE anunció el fin del conflicto con Fermaca mediante la reducción de la tarifa en 25%, al pasar de 14 a 11 centavos de dólar.
“Con este gasoducto, ratificamos nuestro compromiso con México y con el desarrollo de proyectos que garanticen el suministro energético sustentable y de largo plazo para el país, asegurándole un futuro más próspero”, declaró el CEO de Fermaca, Manuel Calvillo.