El precio de la mezcla mexicana de exportación sufrió el martes un duro revés, en línea con sus pares internacionales, para cerrar en mínimos de casi siete semanas.
Los precios del petróleo se replegaron con fuerza por la incertidumbre que generan las nuevas restricciones de movilidad por la pandemia y la lenta aplicación de la vacuna en Europa.
Se prevé que la recuperación de la demanda europea sufra otro golpe, después de que Alemania, Francia e Italia ampliaron sus medidas de bloqueo este mes. Mientras tanto, los casos de coronavirus están aumentando en India y amenazan la recuperación económica del tercer mayor consumidor de hidrocarburos del mundo.
La ampliación de los confinamientos en Europa está siendo provocada por una nueva variante del coronavirus en el continente.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación se desplomó 3.47 dólares, es decir, 5.81%, para cerrar en 56.23 dólares el barril; su menor precio desde el 5 de febrero.
El insumo mexicano, en lo que va del año, aún experimenta una ganancia de 19% respecto a su precio de 47.16 dólares del cierre de 2019.
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En Nueva York, el crudo West Texas Intermediate (WTI) se derrumbó 3.80 dólares, o 6.17%, a 57.76 dólares el barril, su menor pizarra desde el 5 de febrero.
El crudo Brent, en Londres, se replegó 3.83 dólares, o 5.93%, a 6.79 dólares el barril, cotización más baja desde el 8 de febrero. El 12 de marzo avanzó hasta 71.38 dólares, su precio más alto desde el 8 de enero de 2020.
Los precios del petróleo habían repuntado alrededor de 80% desde noviembre hasta mediados de marzo por las expectativas de que el mercado petrolero mundial comenzaba a equilibrarse. Sin embargo, ahora, experimentan una corrección técnica sobre niveles más viables.
Hace tres semanas, incluso, algunos analistas estimaron que los precios del petróleo podrían regresar a la marca de los 100 dólares a finales de 2022.
