Ben van Beurden, CEO de Shell, insistió en que ya no dirige una compañía petrolera y que ahora avanzan en su transición energética.
“No es fácil dirigir una empresa de petróleo cuando las personas dejan de necesitarlo de repente”, acotó Van Beurden en entrevista con Bloomberg.
La crisis petrolera mundial agudizó los desafíos financieros de la petrolera angloholandesa. La empresa sigue cargada de deudas por su adquisición de BG Group por 53 mil millones de dólares en 2015.
Royal Dutch Shell Plc, que reportó una producción de 2.7 millones de barriles por día en febrero; recortó gastos y ajustó sus dividendos por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial.
Este momento precario para la industria petrolera hace más complicado a Van Beurden continuar con una identidad de combustibles fósiles para la compañía de 113 años de historia. Ni siquiera está seguro de querer ser conocido como alguien que dirige uno de los mayores productores de petróleo del mundo.
“El hecho mismo de que se haya referido a nosotros como una compañía petrolera, es sintomático de los problemas que enfrentamos”, destacó.
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Como para probar el punto, van Beurden lanzó un nuevo plan climático para avanzar en su transición energética. El objetivo es reducir todas las emisiones a cero neto para 2050; incluidas las llamadas emisiones de Alcance 3 generadas por los clientes que queman los productos de Shell.
Shell también dijo que fijará un objetivo más estricto del 30% para reducir la huella neta de carbono de sus productos energéticos para el 2030; del 20% actual, y que aspira a un recorte del 65% para el 2050, del 50% actual.
Solo otras tres grandes petroleras —Total, BP y Repsol— comparten la ambición de Van Beurden. Cada una aplica definiciones y métodos dispares para intentar convertirse en una paradoja: la compañía petrolera libre de emisiones.
El plan de Shell es quizás el más ambicioso. El éxito significará tomar medidas que ninguna compañía petrolera ha hecho antes, como vender petróleo solo a clientes que tengan los medios para eliminar o compensar sus emisiones.
