Los precios del petróleo navegan sobre aguas más tranquilas en los mercados internacionales. Las cotizaciones del oro oscilan cerca de sus valores máximos de tres años.
La expectativa de una recuperación sostenida de la demanda mundial de hidrocarburos ha regresado al primer plano en los mercados. En Estados Unidos, el consumo de gasolina, considerado un termómetro de la economía estadounidense, ha aumentado de manera sostenida durante el periodo vacacional.
Asimismo, las expectativas de suministros más ajustados hasta fin de año han dejado en segundo plano las preocupaciones una tercera ola de contagios.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, la mezcla mexicana de exportación aumentó 1.33 dólares, o 2.48%, para concluir en 67.98 dólares el barril. La referencia mexicana oscila en máximos del año y cerca de su techo de octubre de 2018.
El insumo mexicano se desplomó el lunes 6.99% hasta 63.13 dólares, su precio más bajo desde el 25 de mayo. Es importante mencionar que el precio de la mezcla acumula una ganancia de 42% en lo que va del año, con respecto a precio de 47.16 dólares del cierre de 2020.
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En Londres, el crudo Brent subió 1.56 dólares, o 2.2%, para cerrar en 73.79 dólares el barril. Mientras en Nueva York, el crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) aumentó 1.61 dólares, o 2.3%, para concluir en 71.91 dólares. Ambos referentes se acercan a su techo de casi tres años.
Morgan Stanley estima que la demanda de hidrocarburos superará la oferta de petróleo en la segunda mitad del año, lo que contribuirá en mantener los precios sobre la marca de los 70 dólares. La firma de inversión estima que el precio del crudo Brent se negociará entre 75 y 79 dólares por barril durante el resto de 2021.
