Exxon Mobil registró una pérdida sin precedentes de 1,690 millones de dólares en el primer semestre del año.
El desplome de los precios del petróleo impactó su división de producción, mientras que las restricciones de movilidad redujeron la demanda de todo tipo de productos petrolíferos; desde combustible para aviones hasta bolsas de plástico.
En el mismo periodo del año pasado, la petrolera texana reportó una utilidad de 5,480 millones de dólares.
Los ingresos de la petrolera sumaron 88,763 millones, lo que significa una caída de 33% con relación al mismo periodo de hace un año.
Tan sólo en el segundo trimestre, Exxon Mobil registró pérdidas de 1,080 millones de dólares frente a las utilidades de 3,130 millones previos. Los ingresos se desplomaron 53% hasta 32,605 millones de dólares.
Darren Woods, principal ejecutivo de Exxon Mobil, confirmó que la pandemia de coronavirus y las condiciones de exceso de oferta a nivel global provocaron las pérdidas.
“Los bajos precios, márgenes y volúmenes de ventas nos han afectado; pero lo estamos intentando contrarrestar con la reducción del gasto a corto plazo y con la reorganización del negocio”, explicó.
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El crudo West Texas Intermediate (WTI) ha perdido más del 30 % de su valor desde el comienzo del año; mientras las acciones de Exxon se han replegado 40% en lo que va del año.
Exxon destacó que durante el segundo trimestre ha incrementado la producción del alcohol utilizado en el gel hidroalcohólico; y de polipropileno utilizado en mascarillas médicas y batas, como parte de su esfuerzo para proveer una respuesta en la lucha contra la pandemia.
La producción de petróleo equivalente en ese periodo fue de 3.6 millones de barriles diarios, un 7 % menos respecto al año pasado; mientras que la de gas natural bajó un 12%, como reflejo de “las restricciones económicas y gubernamentales”.
