La petrolera britanica BP reportó una caída de 67% en sus ganancias del primer trimestre del año; afectada por el desplome de la crisis petrolera.
BP informó una ganancia de costo de reemplazo subyacente, lo que sería el ingreso neto de la empresa, de 800 millones millones de dólares; cifra que supera el pronóstico de 710 millones de dólares de los analistas. Sin embargo, el resultado es 67% inferior a los reportados por la compañía en 2019, cuando las ganancias fueron de 2 mil 400 millones de dólares.
La compañía también reportó un fuerte aumento de 6 mil millones en su deuda neta, que ahora llega hasta los 51 mil 400 millones.
BP, al igual que sus competidores, asoció los resultados a la caída del 65% en los precios del petróleo.
Bernard Looney, CEO de BP, adelantó que buscarán reducir drásticamente sus gastos y costos para generar ganancias con precios del petróleo por debajo de 35 dólares; en comparación con los 56 dólares por barril de 2019.
«Estamos tomando medidas decisivas para fortalecer nuestras finanzas, reforzando la liquidez, reduciendo rápidamente los gastos y los costos, reduciendo nuestro saldo de caja», añadió.
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La compañía recortó su presupuesto de gastos de 2020 en un 25% en alrededor de 12 mil millones de dólares. También redujo la producción en sus operaciones de esquisto bituminoso en Estados Unidos.
La empresa petrolera mantuvo el pago de dividendos a pesar de la advertencia de condiciones excepcionales de incertidumbre.
«Nuestra industria se ha visto afectada por los choques entre la oferta y la demanda en una escala como no se había visto nunca», señaló Looney.
En el segundo trimestre, BP estima que la demanda mundial de petróleo descenderá alrededor de 15 millones de barriles por día; debido a las restricciones de movimiento relacionadas con el coronavirus, lo que representa aproximadamente el 15% del consumo de crudo de 2019.
