El presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró que el siguiente año comenzará sin sorpresas, es decir, sin aumentos de impuestos, ni gasolinazo. Enfatizó que la economía mexicana transita de manera inmejorable y sin impactó en el bolsillo de los mexicanos.
Señaló que la inflación está controlada y acompañada «de no aumentos de impuestos”. Reiteró que no aumentarán las gasolinas, el diésel, el gas y la electricidad al inicio del año. “Entraba el año y la cuesta de enero y los gasolinazos, pero eso se terminó», validó.
Para 2020, entre los productos que tendrán una actualización al IEPS serán los combustibles, es decir las gasolinas. El IEPS para la magna (menor a 82 octanos) subirá de $4.81 a $4.95, es decir 14 centavos más.
Para la gasolina premium (mayor a 91 octanos) se elevará de $4.06 a $4.18, un incremento de 12 centavos. El impuesto al diésel pasará de $5.28 a $5.44, un incremento de 16 centavos.
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El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) es un gravamen que se aplica todos los meses para lograr las metas de recaudación del gobierno.
Sin embargo, el incremento para el IEPS no tiene por qué representar un aumento directo al precio para el consumidor. Lo anterior, debido a que los distribuidores deberán de ajustar sus precios y así ofrecer el precio más competitivo de acuerdo a libre mercado.
AMLO atribuyó estos resultados a su política de austeridad, al manejo responsable de las finanzas y al destierro de la corrupción de la Hacienda pública.
Es importante señalar que Hacienda modifica cada semana el estímulo fiscal a los combustibles. El ajuste sirve como una especie de subsidio para controlar el impuesto que deben pagar los consumidores, con lo que busca amortiguar los movimientos en los precios internacionales.
