Los precios del petróleo alargaron su franca tendencia alcista hacia máximos de 13 meses en los mercados internacionales. La mezcla mexicana de exportación y el crudo texano acumulan ocho sesiones en alza, mientras que el crudo londinense suma nueve cierres en alza, su mayor racha desde febrero de 2019.
Las expectativas de que los mercados se encuentran cerca del equilibrio están respaldando la reciente racha alcista de los petroprecios. La demanda mundial de combustibles líquidos comienza a estabilizarse mientras la abundante oferta global comienza a ceder.
La administración de Información Energética de Estados Unidos informó que las existencias de crudo descendieron en 6.6 millones de barriles a su nivel más bajo desde marzo. Las cifras contrastaron con las previsiones del mercado de una caída de un millón de barriles.
Citigroup espera que el precio del crudo Brent alcance los 70 dólares por barril al cierre del año, en gran medida, por la política flexible de la OPEP y sus aliados.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación ganó 29 centavos, es decir, 0.51%, para cerrar en 57.13 dólares el barril; su precio más alto desde el 7 de enero de 2020.
El precio del insumo mexicano, que se replegó 18% en 2020, acumula una ganancia de 21% en lo que va del año; con respecto a su valor de 47.16 dólares del cierre de 2020.
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En Londres, el crudo Brent para abril ganó 38 centavos, o 0.61%, a 61.47 dólares el barril, su precio más alto desde mediados de enero de 2020; mientras en Nueva York, el crudo WTI para marzo sumó 32 centavos, o 0.60%, a 58.68 dólares el barril. Amos indicadores acumulan una ganancia de 20% en lo que va del año.
La perspectiva de que la OPEP y sus aliados están comprometidos con estabilizar el mercado petróleo ha impulsado a los precios del petróleo desde comienzos del año.
Sin embargo, los precios del petróleo podrían experimentan una corrección a la baja en el corto plazo. La aparición de nuevas cepas de Covid-19 en varios frentes están activando restricciones de movilidad nuevamente, en detrimento de la demanda de hidrocarburos líquidos.
