Petróleos Mexicanos (Pemex) experimentó una caída de 5.69% en sus ventas de gasolina en el 2019, para acumular tres años consecutivos con descensos en ese rubro.
En los últimos tres años, desde que se abrió el mercado por la Reforma Energética, Pemex ha tenido que competir contra privados en la venta de combustibles.
En 2019, la ventas de gasolina fue de 720 mil 600 barriles diarios en promedio, una caída de 5.69% con relación a 2018. En tanto que las ventas de diésel sumaron 293 mil 200 barriles diarios en promedio el año pasado, 11.5% menos que el año pasado.
Esto significa ventas de 102 mil 400 barriles menos de gasolina y 94 mil barriles menos de diésel que en el 2016, cuando arrancó la libre importación de combustibles al país.
El último repunte de las ventas de gasolinas de Pemex sucedió en el 2016, cuando la gasolina registró ventas de 820 mil barriles diarios en promedio, 3.7% más que en 2015.
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El año pasado, Pemex reportó una caída anual de 15.3% en el valor de las ventas de todos sus petrolíferos en el país. En comparación con el año anterior, vendió un volumen 7.8% inferior en términos anuales de combustibles. En lo que respecta a gasolinas, la reducción anual en valor fue de 12.3%, mientras que en diésel se redujo en 17.4 por ciento.
Por otra parte, la semana pasada se informó que Pemex gastó 14 mil 746 millones de dólares en la importación de combustibles durante el 2019.
Incluso, a finales del año pasado, México presentó un alta dependencia externa en materia de gasolina. Pues 7.5 de cada 10 litros de combustible Magna y Premium, que consumieron los mexicanos, llegaron de refinerías extranjeras.
Las seis refinerías que opera Pemex únicamente cubrieron una cuarta parte del consumo de todo el país. Esto se debió a trabajos de mantenimiento y modernización que se realizaron en cada una de las unidades.