A lo largo del siglo pasado y lo que llevamos de este, el petróleo ya ha sido muy caro en diversas ocasiones; sin embargo, los precios del gas natural alcanzaron máximos históricos en 2022. Por otro lado, las políticas implementadas a partir del Acuerdo de París en 2015, junto con los avances tecnológicos, han contribuido a la disminución de emisiones, pero aún falta mucho para evitar el incremento de 1.5 °C en promedio global.
Si quieres saber más cobre el Acuerdo de París
Mercados energéticos y gas natural
La invasión de Rusia a Ucrania provocó una turbulencia inesperada y extraordinaria en los mercados energéticos, principalmente en los del gas natural. En diversas regiones del mundo, se ha visto afectado el gasto por hogar, el costo para los negocios y la dinámica de economías enteras. Europa es y será el mayor perjudicado durante el invierno 2022-2023. Lo anterior ha provocado altos costos globales del petróleo y el gas.
Consumidores energéticos
Mientras esta situación ha afectado a los consumidores de energéticos, ha beneficiado a los productores, algo parecido a lo sucedido en 2014 con la crisis de los precios del petróleo. Los altos precios de los combustibles representan el 90% de los incrementos en los costos de la electricidad, de ese número, el gas natural implica el 50% por sí solo.
Transición energética y acceso a electricidad asequible
La transición energética se ha planteado como la solución, pero llevará mucho tiempo. En ese lapso, millones de personas podrían perder su acceso a electricidad asequible y continua. En las políticas implementadas de largo plazo, junto a las energías renovables, debe existir energía nuclear y mayor infraestructura eléctrica alimentada por fuentes limpias.
Por: Aldo Santillán
Te puede interesar: Transformación del sistema energético global