Alexander Novak, viceprimer ministro de Rusia, advirtió que los precios del petróleo podrían alcanzar los 300 dólares por barril si Estados Unidos y la Unión Europea prohíben las importaciones rusas de crudo.
Igualmente, Alexander Novak alertó que el mercado petrolero podría enfrentar el posible cierre del principal gasoducto entre Rusia y Alemania.
“Está absolutamente claro que el rechazo del petróleo ruso tendría consecuencias catastróficas para el mercado global”, afirmó Novak.
Los precios del petróleo, que repuntan 60% en lo que va del año, oscilan sobre los 120 dólares en los mercados internacionales. Se ubican cerca de sus máximos históricos y los expertos advierten que podrían escalar a nuevas cimas.
Lo anterior, después de que el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, aseguró que Washington y los aliados europeos estaban considerando prohibir las importaciones de petróleo ruso.
Se espera que el presidente Joe Biden tenga una videoconferencia con los líderes de Francia, Alemania y el Reino Unido; mientras su Gobierno sigue buscando su apoyo para la prohibición de las importaciones.
“El aumento de los precios sería impredecible. Serían 300 dólares por barril, si no más”, reiteró Novak.
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Igualmente, anticipó que le llevaría más de un año a Europa reemplazar el volumen de petróleo que recibe de Rusia.
“Los políticos europeos deben advertir honestamente a sus ciudadanos y consumidores qué esperar. Si desea rechazar los suministros de energía de Rusia, adelante. Estamos listos para ello. Sabemos hacia dónde podríamos redirigir los volúmenes”, advirtió.
Rusia es el segundo mayor exportador de petróleo del mundo y, por mucho, el primer suministrador de gas de Europa.
La Comisión Europea tiene pensado presentar un paquete de medidas para tratar de hacer frente al fuerte incremento de los precios de la energía y a la dependencia del gas ruso.
