Fernando Alanís, presidente de la Cámara Minera Mexicana (Camimex), resaltó que el cierre temporal de actividades ha generado impactos negativos que afectan la liquidez de la industria.
El presidente de Camimex enfatizó que el impacto de la pandemia ha afectado directamente a la industria minera al no ser considerada esencial.
Destacó que la situación se agudiza por la deuda de saldos a favor por mil millones de dólares que les debe el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Lo anterior lo dio a conocer durante los diálogos organizados por la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin); Alanís advirtió que el gremio se ha visto impactado con la pérdida de 47 mil 300 empleos, principalmente de contratistas.
“Para el 2020 se habían pronosticado inversiones por 4 mil millones de dólares, las cuales seguramente se verán seriamente afectadas por los efectos del coronavirus”, anticipo.
Anticipó que de continuar los próximos dos meses con cierres, se dejará de contribuir al erario público con unos 14 mil 600 millones de pesos; eso por cada dos meses que estén detenidos.
Alanís Ortega alertó que incluso habrá un impacto en la generación de divisas en el país; pues dos meses representan una caída de 2 mil millones de dólares que crearía el sector por concepto de exportaciones.
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“El reto actual es que las actividades de extracción se consideren esenciales, es decir, como cadenas productivas y no como aisladas; pues 21% ciento de la falta de producción de las empresas en general se debe a la falta de insumos”, ahondó.
Indicó que el sector minero aporta economía y suministros esenciales para muchas comunidades del país.
“No definir al sector minero como un sector esencial, no sólo es afectar económicamente a miles de trabajadores; sino también dejar solas a comunidades en donde operamos y a quienes le proveemos de servicios básicos de salud”, resaltó.
