El precio de la mezcla mexicana de exportación cerró el viernes con pizarras positivas, para acumular su cuarta alza semanal, mientras amplía su ganancia en el año a 51%.
En los mercados de ambos lados del Atlántico, los precios del petróleo continuaron con su rally alcista por las expectativas de una oferta global ajustada de hidrocarburos.
Los mercados especulan que nuevas sanciones contra Rusia podrían generar una escasez de hidrocarburos en Europa. Rusia es el segundo mayor exportador de petróleo del mundo y, por mucho, el primer suministrador de gas de Europa.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación ganó el viernes 0.74% para cerrar en 107.86 dólares por barril. Ese es su mejor precio desde el 25 de marzo. Sin embargo, el valor de la mezcla aún se ubica lejos de su máximo del año. El 8 de marzo, la mezcla concluyó en 119.62 dólares por barril, su precio más alto desde julio de 2008.
En lo que va del año, el insumo acumula una ganancia de 51% frente al precio de 71.29 dólares registrado al cierre de 2021.
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En Londres, el crudo Brent para entrega en julio avanzó 0.46% para cerrar en 112.55 dólares el barril. El 8 de marzo, el crudo londinense escaló hasta 139 dólares, su mayor precio desde 2008.
Mientras en Nueva York, el crudo WTI ascendió 0.91% para cerrar en 113.23 dólares el barril.
El crudo WTI anotó su cuarta alza semanal consecutiva por primera vez desde mediados de febrero; mientras que el petróleo Brent marcó un alza semanal de 1% tras haber caído alrededor del 1% la semana pasada.
Desde marzo, expertos han señalado que los precios del petróleo seguirán oscilando sobre la marca psicológica de los 100 dólares. JPMorgan advirtió que el precio del crudo Brent podría escalar hasta 185 dólares el barril en caso de un corte del suministro del petróleo y gas ruso.
Mientras que la agencia Rystad Energy estimó que el crudo Brent podría llegar a 240 dólares en este verano si el conflicto se prolonga y los países continúan sancionando las importaciones rusas. Vladimir Putin fue más temerario y advirtió que el petróleo podría escalar hasta 300 dólares.