El precio de la mezcla mexicana de exportación experimentó una caída superior al 9% en el mes de septiembre; en línea con el retroceso de los precios del petróleo en los mercados internacionales.
Las expectativas de una recaída de la economía mundial por el aumento de contagios por Covid-19 influyeron en la caída mensual del petróleo.
El aumento de casos de covid-19 en Estados Unidos y Europa mantuvo a los precios del petróleo con el freno de mano puesto. El rebrote nuevos casos podría reactivar restricciones de movilidad en detrimento de la economía y la demanda de hidrocarburos líquidos.
El ministro de Energía ruso, Alexander Novak, valoró que el mercado mundial del petróleo se ha mantenido estable durante los últimos meses; regresando cerca del equilibrio entre la oferta y la demanda, pero advirtió sobre los riesgos latentes de una segunda ola de casos de Covid-19.
En Estados Unidos, las refinerías están luchando por contener la sobreproducción de combustibles, como el diésel; en medio de un colapso de la demanda de combustibles para el transporte.
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En este contexto, el precio de la mezcla de Pemex experimentó una caída en septiembre de 3.73 dólares, o 9.13%, para cerrar en 37.12 dólares el barril. El insumo mexicano había experimentado una ganancia de 10.58% en agosto, hasta un precio de 40.85 dólares el barril.
El insumo mexicano en lo que va del año experimenta una caída de 35%, con respecto a su precio de 57.68 dólares del cierre de 2019.
Del lado positivo, los precios del petróleo cerraron el mes de septiembre sobre soportes técnicos importantes, niveles que han respectado en las semanas previas. Las marcas se ubican sobre los precios de 37 para la mezcla, los 40 dólares para el WTI y los 42 dólares para el Brent.
