Rubén del Pozo Mendoza, presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México (AIMMGM), advirtió que el litio en el país no representa, por ahora, la riqueza inmediata que se ha planteado desde el discurso oficial, debido a la limitada exploración geológica, la carencia de tecnología especializada y la insuficiencia de recursos financieros destinados a su desarrollo.
El dirigente del gremio minero explicó que, aunque el litio ha sido catalogado como un mineral estratégico para la transición energética, México aún se encuentra lejos de contar con las condiciones necesarias para su aprovechamiento económico. En ese contexto, cuestionó la viabilidad operativa de Litio para México (LitioMx), la empresa estatal encargada de su exploración y eventual explotación, al considerar que no dispone del presupuesto ni de las capacidades técnicas requeridas.
Del Pozo subrayó que el litio no es un recurso que pueda explotarse de manera inmediata. Antes de pensar en su comercialización, dijo, es indispensable conocer con precisión la ubicación de los yacimientos, su volumen y las características geológicas que determinan su viabilidad. “Ese proceso implica años de trabajo, inversiones elevadas y tecnología de punta”, puntualizó.
Asimismo, señaló una contradicción en la política pública al impulsar el litio como motor de desarrollo mientras se restringe la minería a cielo abierto, método que, afirmó, es indispensable para su extracción. Desde su perspectiva, esta incongruencia evidencia una falta de comprensión técnica sobre cómo se desarrollan este tipo de proyectos.
El presidente de la AIMMGM recordó que la inversión en exploración minera en México se ubicó en 437.76 millones de dólares, el nivel más bajo en décadas, lo que limita la posibilidad de identificar y cuantificar yacimientos no solo de litio, sino de otros minerales estratégicos.
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Finalmente, sostuvo que sin la participación complementaria de la iniciativa privada, el país dependerá únicamente del Servicio Geológico Mexicano, el cual no cuenta con los recursos suficientes para realizar exploraciones a gran escala. En ese sentido, llamó a las autoridades a basar las decisiones regulatorias en criterios técnicos y a facilitar los permisos de exploración que permitan conocer el verdadero potencial litífero de México.
