Ciberseguridad en Data Centers; en México se experimentarán 299 ataques por minuto, por José Alberto Llavot, PreSales & BDM Manager del área de Secure Power de Schneider en Norteamérica.
Desde hace dos décadas se dio inicio a lo que hoy conocemos como era digital. El cambio trascendental que ésta implicó para las diferentes industrias fue la transición de un mundo interconectado por redes eléctricas fijas de flujos intermitentes a un amplio universo alámbrico e inalámbrico de energía ininterrumpida. A la cual se sumó la proliferación de nuevas tecnologías y equipos de cómputo cada vez más sofisticados.
Ante este panorama, el almacenamiento y centralización de datos digitales empezaba a abrirse camino con más retos que certezas. Para entonces, los conceptos de nube de almacenamiento, codificación cifrada o rendimientos y eficiencia digital eran apenas incipientes. Sin embargo, los avances en materia de programación y software sí albergaban sus propios códigos de reserva y autogestión.
Ahora bien, otra es la historia que se cuenta tras veinte años de avances tecnológicos acelerados. Hoy se habla de un mundo totalmente hiperconectado. Con un cúmulo exponencial de datos digitales que se almacenan en el ciberespacio y en centros de datos especializados. Cuyo mayor reto es ofrecer una administración segura y confiable.
De acuerdo con el último informe del Cyberthreat Defense Report, tanto en 2021 como en 2022, el 85.3% de las empresas señalaron sufrir ataques cibernéticos. Al menos, el 76% pronostica volver a ser víctima de este tipo de amenazas digitales. Asimismo, GlobalData predice que el mercado latinoamericano de servicios de data centers se expandirá a una tasa anual compuesta de 22.4% entre 2020 y 2023.
Te puede interesar: Schneider Electric presenta primer guía de métricas para centros de datos
Actualmente, hay 103 centros de datos de colocación en Sudamérica y 33 en Centroamérica. De los cuales Brasil representa la gran mayoría (49), mientras que Argentina, Chile y México poseen respectivamente 14, 11 y 10.
En tanto, el Panorama de Amenazas en América Latina 2021 de Kaspersky señala que la tendencia de crecimiento en ciberataques también se refleja en todos los países, con la excepción de Costa Rica, que registró un leve aumento del 2%.
Adicionalmente, la lista de países la lidera Ecuador (+75%), seguido por Perú (+71%), Panamá (+60%), Guatemala (+43%) y Venezuela (+29%). En total, solo el Top20 de malware en la región genera un promedio de 35 ataques por segundo. En este contexto, Brasil lidera la región con más de 1,390 intentos de infección por minuto, seguido de México (299 por minuto); Perú (96 por minuto), Ecuador (89 por minuto) y Colombia (87 por minuto).
Es aquí donde el concepto de ciberseguridad resulta vital frente a posibles amenazas que pongan en riesgo la continuidad de procesos operativos. Igualmente, de rendimientos en centros de datos de industrias de diversa índole.
Una estrategia de ciberseguridad consiste justamente en la protección de posibles ciberataques a sistemas, redes y programas digitales. Las cuales tienen por fin acceder, modificar o destruir datos con tipologías que van desde lo masivo hasta lo confidencial y funcional.
Para garantizar la seguridad en Data Centers se deben proporcionar servicios de evaluación y planificación que cubran todos sus dominios de propiedad, acceso y portabilidad; especialmente los de mayor vulnerabilidad como pueden ser los sistemas de construcción, energía y aire acondicionado.
Sigue leyendo: Nueva planta de Schneider Electric en El Paso, Texas aumentará la capacidad de fabricación nacional
De este modo, Data Centers con estándares de alta seguridad son cruciales actualmente para las organizaciones en tanto minimizan los riesgos de sabotaje o intrusión.
Schneider Electric por ejemplo cuenta con una ruta de cuatro fases para garantizar su estrategia de seguridad en Data Centers:
- Permitir: considera todo lo relacionado con accesos remotos seguros, autenticaciones, autorizaciones, etc.
- Proteger: subraya lo relativo a la protección de endpoints, antimalware, etc.
- Detectar: vigila y gestiona y da seguimiento a anomalías o intrusiones.
- Responder: se preocupa por el backup, la recuperación oportuna de incidentes, etc.
Finalmente, contar con una estrategia de ciberseguridad en centros de datos proporciona la defensa continua de activos y sistemas. Al tiempo que integra soluciones para administrar múltiples dispositivos, lo que al final no sólo se traduce en seguridad sino en sostenibilidad e innovación.
