México podría producir 900 mil barriles por día (mbpd) de aceite adicionales a su producción actual para el 2040, si continúan las rondas petroleras. Este resultado lo arrojó un ejercicio prospectivo realizado por la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (AMEXHI). Igualmente, el estudio prevé la producción de 2400 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) más de gas para 2037.
Además, se contempla que del 2020 al 2040 existe el potencial de generar 104 mil millones de dólares (mmdd) por contraprestaciones al Estado; lo anterior sin la necesidad de que el gobierno invierta en exploración y extracción. Para la realización del documento, se tomó en cuenta la última versión del Plan Quinquenal de la Secretaría de Energía (SENER); también, las prospectivas de producción que realizó la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH); y la distribución a entidades federativas empleada por la Secretaría de Hacienda (SHCP).
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Del total de lo que recibiría el Estado, se distribuirían alrededor de 32 mil mmdd a las entidades federativas. El Estado de México, la capital de nuestro país, Jalisco, Veracruz y Nuevo León serían los más beneficiados por las contraprestaciones. Por otra parte, se estimó que la principal producción durante el mismo periodo de 20 años se daría con pozos terrestres no convencionales. Así, los estados más afectados serían los que tuvieran mayor potencial de este tipo de yacimientos. Para esta clasificación, las contraprestaciones en favor del gobierno e impuestos se valoraron en 54,742 mil mmdd.
Igualmente, de acuerdo con la AMEXHI, aguas profundas tiene un porcentaje de 4,310 mil mmdd, pues tardan 15 años aproximadamente en producir el primer barril; sin embargo, en un ejercicio de escala de tiempo mayor, se prevé un incremento considerable en la producción.
Los supuestos del ejercicio se basaron en un precio de crudo de 60 dólares por barril y tres dólares por unidades térmicas medidas para el gas a lo largo del periodo de estimación; sin tomar en cuenta la tasa de descuento. Adicionalmente, para la estimación de las contraprestaciones se emplearon los resultados de variables de adjudicación observadas en rondas de licitación previas. Por último, para la distribución estimada a los estados se utilizó la metodología de distribución descrita en el Informe EITI México 2018.
