Los precios del petróleo se experimentaron este martes sus peores descensos desde noviembre por la disminución de las tensiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania.
Rusia informó que algunas de sus tropas están comenzando a regresar a sus bases permanentes, tras permanecer varias semanas cerca de la frontera con Ucrania. El anuncio relajó las preocupaciones de los mercados e invitó a los inversionistas a retirar algunas ganancias.
Los precios del petróleo acumulaban un rally de 25 en las primeras semanas del año por un recrudecimiento de la tensiones en Europa del Este.
Sin embargo, los precios del petróleo lograron permanecer por arriba de la marca psicológica de los 90 dólares, un soporte clave para marcar un cambio tendencia.
Reportes de inteligencia estadounidense habian revelado el fin de semana que Rusia podría invadir a Ucrania en cualquier momento. Washington, en respuesta, ordenó a sus connacionales a salir de Ucrania. El anuncio fue interpretado como una señal de ataque inminente.
Una invasión de Rusia en Ucrania podría generar un desabasto de hidrocarburos en esa región, en momentos en los que la oferta global es ajustada.
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En este contexto, Londres, el crudo Brent descendió 3.61% para cerrar en 93.19 dólares el barril. Mientras en Nueva York, el crudo WTI perdió 3.55% para cerrar en 92.07 dólares el barril.
Durante la sesión de ayer, el crudo Brent escaló hasta 96.78 dólares el barril, su precio máximo desde septiembre de 2014. Igualmente, el WTI alcanzó los 95.82 dólares, también su techo desde septiembre de ese año.
En México, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla perdió 2.89 dólares, es decir, 3.24%, para cerrar en 86.21 dólares por barril. Ayer concluyó en 89.10 dólares, su precio más alto desde septiembre de 2014. En lo que va del año, el insumo mexicano gana 21% respecto a su precio de 71.29 dólares del cierre de 2021.
Analistas aún estiman que los precios del petróleo podrían escalar hasta los 100 dólares en algún momento de este mes. Incluso, advierten que, un recrudecimiento de la tensión geopolítica en Europa del Este podría activar una nueva ola de compras especulativas y llevar los precios a 130 dólares.