El precio de la mezcla mexicana de exportación cerró hoy con una ganancia de casi 3%, en línea con el repunte de sus pares internacionales, animado por la expectativa de un aumento de la demanda por combustible en el verano.
En los mercados de ambos lados del Atlántico, los precios del petróleo ignoraron el repunte del dólar y cerraron en su mejor valor de una semana.
Igualmente, los precios ignoraron las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos mantendrá las tasas de interés altas por más tiempo.
A lo largo de la semana pasa, en los mercados internaciones, los precios del petróleo resintieron las débiles expectativas de la demanda de combustibles en Estados Unidos y China.
Adicionalmente, la decisión de la OPEP y sus aliados de ampliar sus recortes de producción hasta 2025 ofreció un impulso bajista adicional. Y es que la OPEP+ dejó margen para bajas voluntarias de ocho de sus miembros principales a partir de octubre. Una postura que decepcionó a los mercados.
Cabe señalar que, desde hace semanas, los precios del petróleo han estado bajo una fuerte presión bajista. La “prima de riesgo” de la guerra se ha evaporado, por lo que los participantes se han enfocado en los fundamentos del mercado: oferta y demanda.
Hay que recordar que, en el primer trimestre de 2024, el crudo Brent escaló hasta los 90 dólares, en ese momento, su valor máximo de cinco meses.
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En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación ganó 1.71 dólares, es decir, 2.42%, para cerrar en 72.20 dólares el barril. Su precio más alto desde el 31 de mayo. Hace ocho semanas, el 5 de abril, la mezcla terminó sobre los 80 dólares, en ese momento, su precio más alto desde el 27 de octubre de 2023.
En Londres, el contrato del crudo Brent para entrega en agosto ganó 2.52% para cerrar en 81.63 dólares el barril. Mientras, en el mercado de Nueva York, el crudo WTI para julio ascendió 2.93% para culminar en 77.74 dólares por barril. Ambos referentes registraron su mayor precio desde el 30 de mayo.
En mayo, analistas de Goldman Sachs ajustaron el techo del precio del crudo Brent a 90 dólares por barril. Expertos independientes aún estiman que los precios del petróleo podrían oscilar sobre la marca de los 80 dólares en el corto plazo.