El precio de la mezcla mexicana de exportación cerró el viernes sobre la marca de los 80 dólares por primera ocasión desde finales de octubre 2023, al acumular una ganancia semanal de 5.0%.
En los mercados internacionales, los precios del petróleo cerraron con pizarras positivas, al prevalecer las expectativas sobre las tensiones geopolíticas. Las embajadas israelíes en Estados Unidos han sido puestas en alerta máxima tras las crecientes amenazas de un ataque iraní contra diplomáticos israelíes. Una escalada del conflicto en Medio Oriente podría podría restringir aún más los suministros globales.
En el primer trimestre de 2024, los precios del petróleo escalaron cerca de 15% por el recrudecimiento de las tensiones en Europa del Este y la Franja de Gaza.
Los mercados esperan una oferta más ajustada por los recortes de la OPEP+ y los ataques a las refinerías rusas. Simultáneamente, los mercados esperan una mayor demanda de hidrocarburos en Estados Unidos y China, los dos mayores consumidores de hidrocarburos del mundo.
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En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación ganó 0.65 centavos de dólar, es decir, 0.52%, para cerrar en 80.17 dólares el barril. Ese es su mayor precio desde el 27 de octubre de 2023.
Cabe señalar que, desde su pico máximo de 2022, de 119.62 dólares establecido el 8 de marzo (su valor más alto desde 2008), la mezcla mexicana se anota un descenso de 33%.
En Londres, el contrato del crudo Brent para entrega en junio ganó 0.35% para cerrar en 90.97 dólares el barril. Mientras, en el mercado de Nueva York, el crudo WTI para entrega en mayo avanzó 0.20% a 86.76 dólares por barril.
Ambos contratos cerraron en sus mejores valores desde octubre, tras haber recibido apoyo en los últimos días de un aumento de la tensión geopolítica y los posibles riesgos para el suministro.
Igualmente, los avances del día abonaron para que ambos indicadores registraran ganancias semanales por segunda ocasión consecutiva. El WTI ganó 4.24% y el Brent del Mar del Norte ascendió 3.92%.
A finales del año pasado, agencias calificadoras estimaron que los precios internacionales del petróleo crudo podrían alcanzar los 100 dólares en algún momento del invierno boreal. Esa expectativa aún podría cumplirse en el verano boreal, en caso de un recrudecimiento de las tensiones geopolíticas.
