El precio de la mezcla mexicana de exportación cerró el viernes con una ganancia de 2.5%, al término de una semana volátil, donde perdió 2.13%. Sin embargo, en el mes de abril, el referente mexicano logró una ganancia de 4.45%.
En los mercados internacionales, los precios del petróleo cerraron el viernes con registros positivos; no obstante, culminaron con su quinta pérdida mensual consecutiva.
El avance del viernes estuvo asociado al repunte de la demanda de combustible en Estados Unidos, en dirección opuesta a las previsiones del mercado.
Cabe señalar que, los precios del petróleo registran 10 caídas mensuales en los últimos 11 meses en los mercados internacionales. Su peor racha negativa desde la pandemia de 2020, por las vacilantes expectativas sobre el consumo mundial de energía. Igualmente, las presiones inflacionarias alrededor en las economías industrializadas han ejercido presión sobre el valor de los activos del “oro negro”.
En marzo del año pasado, los precios del petróleo habían repuntado cerca de máximos históricos (139 dólares), catapultados por la invasión a Ucrania. Sin embargo, las advertencias de una contracción económica global han generado volatilidad en los mercados y borrado un 40% del valor de los “petroprecios” desde entonces.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación repuntó el viernes 1.66 dólares, es decir, 2.5%, para cerrar en 67.03 dólares el barril. En el mes de abril se anotó una ganancia de 4.42%.
Desde su máximo del 2022, de 119.62 dólares establecido el 8 de marzo (su valor más alto desde 2008), la mezcla mexicana experimenta un descenso de 44%.
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En Londres, el crudo Brent para entrega en junio ganó 1.49% para concluir en 79.54 dólares por barril. Durante la semana retrocedio 2.6% para acumular su cuarta caída mensual consecutiva. Cabe recordar que, el 8 de marzo de 2022, el crudo Brent saltó a 139 dólares, su mayor precio desde 2008.
En Nueva York, el crudo WTI con liquidación en junio avanzó 2.7% para cerrar en 76.78 dólares el barril. Durante la semana descendió 1.4% para acumular su sexta caída mensual consecutiva, su peor racha desde 2015.
JP Morgan estima que es más probable que los precios de petróleo oscilen en la banda de los 70 dólares en el corto plazo, antes de consolidarse sobre la marca de los 80 dólares.
La agencia Rystad Energy estima que los precios internacionales del petróleo crudo superarán los 100 dólares por barril este verano.
A finales del año pasado, Citigroup advirtió que, el precio del petróleo podría desplomarse hasta 65 dólares por barril. Incluso, alertó que el barril del oro negro podría caer hasta los 45 dólares a finales de 2023 en caso de una fuerte desaceleración económica.
Esa expectativa contrasta con algunas proyecciones positivas de inicios de este año. En enero, el banco BofA estimó que los precios del Brent podrían regresar a los 100 dólares por barril en la segunda mitad de 2023. Adicionalmente, Goldman Sachs pronosticó que el precio del crudo Brent podría escalar a los 105 dólares a finales de 2023.
