El precio de la mezcla mexicana de exportación cerró el martes con una variación marginal, al término de una sesión volátil.
En los mercados internacionales, los precios del petróleo fueron presionados por los datos económicos más débiles de lo esperado en China y Estados Unidos. Los datos contrarrestaron la previsión de aumento de la demanda mundial de la Agencia Internacional de Energía (AIE).
En China, la producción industrial y el crecimiento de las ventas minoristas fueron inferiores a las previsiones en abril. Lo que sugiere que la segunda mayor economía del mundo perdió impulso a principios del segundo trimestre.
Adicionalmente, los datos estadounidenses mostraron que las ventas minoristas aumentaron menos de lo esperado en abril. Lo que sugiere que los consumidores sienten el impacto de la inflación y el aumento de las tasas de interés.
El lunes, los precios del petróleo avanzaron por la expectativa que la OPEP y sus aliados harán lo necesario para estabilizar la oferta.
La OPEP+ están llevando a cabo recortes adicionales de producción, los cuales están reduciendo los volúmenes de crudo agrio. Esa maniobra podría reducir la oferta mundial de crudo aún más en el segundo semestre.
Cabe señalar que, los precios del petróleo registran 10 caídas mensuales en los últimos 11 meses en los mercados internacionales. Su peor racha negativa desde la pandemia de 2020, por las vacilantes expectativas sobre el consumo mundial de energía. Igualmente, las presiones inflacionarias alrededor en las economías industrializadas han ejercido presión sobre el valor de los activos del “oro negro”.
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En marzo del año pasado, los precios del petróleo habían repuntado cerca de máximos históricos (139 dólares), catapultados por la invasión a Ucrania. Sin embargo, las advertencias de una contracción económica global han generado volatilidad en los mercados y borrado un 40% del valor de los “petroprecios” desde entonces.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación descendió 4 centavos, es decir, 0.06%, para cerrar en 62.88 dólares el barril.
Desde su máximo del 2022, de 119.62 dólares establecido el 8 de marzo (su valor más alto desde 2008), la mezcla mexicana experimenta un descenso de 48%.
En Londres, el crudo Brent para entrega en junio perdió 0.4% para concluir en 74.91 dólares por barril. Cabe recordar que, el 8 de marzo de 2022, el crudo Brent saltó a 139 dólares, su mayor precio desde 2008.
En Nueva York, el crudo WTI con liquidación en junio descendió 0.3% para cerrar en 70.86 dólares el barril.
JP Morgan estima que es probable que los precios de petróleo oscilen en la banda de los 70 dólares en el corto plazo, antes de poder consolidarse sobre la marca de los 80 dólares.
La agencia Rystad Energy aún estima que los precios internacionales del petróleo crudo superarán los 100 dólares por barril este verano.
A finales del año pasado, Citigroup advirtió que, el precio del petróleo podría desplomarse hasta 65 dólares por barril. Incluso, alertó que el barril del oro negro podría caer hasta los 45 dólares a finales de 2023 en caso de una fuerte desaceleración económica.
