El trabajo presentó una técnica para el mejoramiento sísmico para la prospección de carbonatos del FTS en la Cuenca de Veracruz.
La imagen sísmica en los bloques de carbonatos del Frente Tectónico Sepultado es de regular calidad. Debido a que las velocidades altas de los carbonatos impiden las reflexiones de la señal sísmica, dando como resultado una imagen distorsionada.
Actualmente se aplican nuevos flujos de trabajo en el procesamiento sísmico en profundidad. Enfocados en el comportamiento estructural del FTS, considerando las diferentes escamas, espesores y velocidades de estos bloques cabalgados.
El resultado es una mejora en la imagen sísmica, consistente con el marco estructural del área, permitiendo visualizar diferentes prospectos exploratorios en la Cuenca de Veracruz.
Cabe señalar que la exploración petrolera en los carbonatos alóctonos del Cretácico que conforman al Frente Tectónico Sepultado en la Cuenca de Veracruz inicia en la década de los 50’s. Al inicio utilizó métodos potenciales y las primeras líneas de sísmica de reflexión; el descubrimiento de estos campos termina en la década de los 80’s. Con la adquisición sísmica en la década de los 90’s comienza los descubrimientos de los diferentes campos de gas en el área. Disminuyendo la exploración en el FTS debido principalmente a la pobre imagen sísmica.
En los últimos años, el desarrollo en las tecnologías de cómputo y electrónica, han permitido aplicar algoritmos de procesamiento sísmico en profundidad de mayor resolución resultando en una mejora de imagen en objetivos profundos y en áreas de geología compleja. La Cuenca de Veracruz ha ido evolucionando durante diferentes etapas de desarrollo obteniendo diversos resultados que favorecen a la exploración.
Te puede interesar: Aplicación de un Gemelo Digital en una Instalación de Producción
En la actualidad existen algoritmos de migración en profundidad como el RTM que generan una buena imagen sísmica en áreas con geología compleja. La metodología que se ha implantado en los diferentes procesados sísmicos a lo largo del FTS. Consiste a grandes rasgos en una adecuación del dato sísmico, para generar el campo de velocidades inicial y hacer tomografías con calibración de pozos.
La etapa más importante en esta metodología es la interacción del grupo multidisciplinario de geocientificos. Para modelar las diferentes escamas que conforman el Frente Tectónico Sepultado, finalizando con una migración RTM.
La integración regional de información geológica-geofísica y las nuevas tecnologías aplicadas han permitido la obtención de una mejor imagen sísmica en profundidad. Reduciendo la incertidumbre y el riesgo de oportunidades exploratorias.
Igualmente, el modelado sísmico del FTS por bloques o escamas independientes aplicado a la secuencia de proceso ha favorecido la adecuada definición del modelo estructural. Apoyando la evaluación de su potencial.
Finalmente, la existencia de campos en la porción norte del FTS asociado con el éxito de perforaciones recientes fortalece la estrategia para dar continuidad a la exploración y evaluación de potencial en el área.
El Ingeniero Erick Eduardo Martinez Pichardo presentó el trabajo en la reciente edición del Congreso Mexicano del Petróleo (CMP).
