Durante el tercer trimestre de 2025, los ingresos por exportación de crudo mexicano se redujeron a 3,184 millones de dólares, una contracción de 31% respecto al mismo periodo del año anterior, informó Petróleos Mexicanos (Pemex). Esta tendencia confirma una disminución sostenida en la última década, con un retroceso acumulado de 45% desde 2018, año en que se modificó la política energética nacional.
En contraste, las importaciones de petrolíferos —como gasolinas, diésel y turbosina— sumaron 4,226 millones de dólares, cifra superior al ingreso por exportaciones, aunque con una reducción de 33% anual. En términos históricos, el gasto en compras externas también ha disminuido 22% en diez años y 47% frente a 2018, reflejando una menor dependencia del mercado internacional para abastecer combustibles.
El valor de las importaciones de gasolinas alcanzó 2,715 millones de dólares, un 31% menos que en 2024 y 45% inferior al nivel de 2018. En tanto, la adquisición de diésel fue de 584 millones de dólares, cifra que representa una drástica caída de 57% anual y 71% respecto a 2018, consolidando la tendencia hacia un mayor procesamiento nacional.
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Precisamente, el Sistema Nacional de Refinación (SNR) alcanzó su mayor nivel de actividad en una década, con una producción promedio de 1.017 millones de barriles diarios de petrolíferos en el tercer trimestre. Este volumen representa un incremento de 57% en comparación con 2018 y un 1.3% más respecto al trimestre previo.
La refinería Olmeca–Dos Bocas, en Tabasco, destacó con su mejor desempeño desde su entrada en operación, al procesar 194,874 barriles diarios en septiembre, un avance mensual de 46%. Sin embargo, el promedio nacional de procesamiento de crudo se redujo 10% en el mismo mes, para ubicarse en 949,772 barriles por día, el nivel más bajo en cuatro meses.
Con estos resultados, la utilización de la capacidad instalada de refinación nacional se mantiene en 48%, mientras Pemex continúa con su estrategia de incrementar la producción de combustibles en el país, reducir las importaciones y avanzar hacia la autosuficiencia energética.
La empresa productiva del Estado reafirmó que su objetivo es consolidar un sistema de refinación más eficiente y sustentable, capaz de cubrir la demanda nacional con producción propia en los próximos años.

 
		