Chevron USA Inc., subsidiaria de Chevron Corporation, y la firma de servicios petrolíferos Halliburton presentaron un innovador sistema inteligente de fracturación hidráulica en los yacimientos de esquisto de Colorado.
Esta innovación conjunta aprovecha las terminaciones de circuito cerrado basadas en retroalimentación para mejorar el rendimiento, la precisión y la eficiencia de los activos. Lo que representa un gran avance para la digitalización en la producción de petróleo no convencional.
La tecnología reemplaza los controles manuales con la ejecución automatizada de etapas en tiempo real, basada en la retroalimentación del subsuelo. Este proceso autónomo utiliza la plataforma ZEUS IQ de Halliburton —con el sistema de fracturación automática OCTIV y las herramientas de monitoreo Sensori— para crear un ciclo dinámico y autoajustable.
Analiza continuamente la presión, el flujo y los datos geomecánicos para adaptarse a las condiciones cambiantes del fondo del pozo.
Chevron aporta su experiencia en ingeniería del subsuelo y sus algoritmos patentados. Lo que permite al sistema ajustar con precisión las estrategias de fracturación durante la operación. A diferencia de los modelos estáticos, esta configuración reacciona al comportamiento del yacimiento en tiempo real. Mejorando la complejidad de la fractura, el contacto con el yacimiento y la recuperación de hidrocarburos.
La tecnología reduce la variabilidad de la ejecución, garantiza la consistencia entre las terminaciones y permite a las cuadrillas centrarse en la optimización de alto nivel en lugar de los controles rutinarios. Las ventajas ambientales también son notables: menor uso de fluidos, menores emisiones y un impacto mínimo en la superficie.
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Kim McHugh, vicepresidente de Chevron, afirmó que el sistema refleja el objetivo de la compañía de mejorar el rendimiento de forma segura mediante la innovación y la colaboración estratégica.
Shawn Stasiuk, vicepresidente de Halliburton, destacó el impacto directo de la revolución digital en el yacimiento, acelerando la experimentación y el perfeccionamiento en campo.
El éxito del proyecto podría establecer un estándar global para la fracturación inteligente en formaciones de esquisto y compactas. Con una arquitectura escalable y conectividad en la nube, el sistema de Chevron y Halliburton está listo para una adopción más amplia en Norteamérica. Y otras partes del mundo, ofreciendo una producción de energía más inteligente, limpia y eficiente.
