El precio de la mezcla mexicana de exportación retomó el martes su escalada alcista hacia la marca psicológica de los 80 dólares, para ampliar su ganancia en el año a 65% en el año.
En Londres, el crudo Brent escaló hasta 85 dólares por primera ocasión en casi siete años. En los mercados internacionales, los precios del petróleo cerraron con pizarras positivas por las expectativas de un invierno más frío de lo estimado en Asia y Europa. Esos pronósticos se presentan justo cuando existe una escasez de suministro de energía en el mundo.
Los precios del petróleo acumulan un rally de 20% desde comienzos de septiembre por los reportes escasez de carbón y gas en Asia y Europa. Sin embargo, ese aumento podría acelerar la inflación y enfriar la recuperación mundial.
Asimismo, el descenso de las temperaturas en China reavivó la preocupación sobre si el mayor consumidor energético global puede satisfacer la demanda local para calefacción.
En este contexto, de acuerdo Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación ganó 42 centavos, es decir, 0.54%, para cerrar en 77.78 dólares por barril. Ese es su precio más alto desde el 3 de octubre de 20218, cuando cerró en 77.73 dólares.
Ahora, el insumo mexicano se encamina a la marca psicológica de los 80 dólares, una cifra que no supera desde el 13 de octubre de 2014. En lo que va del año, el insumo mexicano experimenta una ganancia de 65% frente a su precio de 47.16 dólares del cierre de 2020.
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En Londres, el contrato del crudo Brent para diciembre ganó 75 centavos, es decir, 0.89%, para cerrar en 85.08 dólares por barril. Su precio aún es el más alto desde octubre de 2018. Goldman Sachs estima que el precio del Brent podría escalar hasta 90 dólares por barril al comienzo del invierno.
Al otro lado del Atlántico, en Nueva York, el crudo WTI para noviembre ganó 52 centavos, es decir, 0.63%, para cerrar en 82.92 dólares. Su precio máximo desde noviembre de 2014.
En las últimas siete semanas, los precios del oro negro se han beneficiado de los reportes de un aumento de la demanda de crudo para apoyar la generación de energía global. Y es que las interrupciones de la producción mundial han obligado a las empresas de energía a extraer grandes cantidades de crudo de sus inventarios.
