Baker Hughes, empresa estadounidense de servicios petroleros, multiplicó sus ganancias en el primer trimestre de 2023, pese a la volatilidad del mercado.
La firma estadounidense reportó una ganancia neta atribuida de 576 millones de dólares, ocho veces más que las ganancias de 72 millones del mismo periodo del año pasado.
En tanto, la facturación de la compañía sumó 5,716 millones de dólares, un 18.2% más que en el primer trimestre de 2022.
Por segmentos de negocio, los servicios para campos petrolíferos y equipamientos se anotaron 3,577 millones de dólares, un 18.6% más que los primeros tres meses de 2022. Mientras que el área industrial y energética facturó un 17.6% más, hasta los 2,138 millones de dólares.
Al cierre del primer trimestre, Baker Hughes registró nuevos pedidos por valor de 7,632 millones un 11.6% más que en el mismo periodo de 2022.
Lorenzo Simonelli, presidente y CEO de Baker Hughes, comentó que aunque el año comentó con algunas inestabilidades, son muy optimistas hacia el futuro.
“Aunque 2023 empezó con algunas inestabilidades macroeconómicas, somos optimistas con las perspectivas del sector energético y de Baker Hughes”, confió.
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Por otro lado, la empresa contabilizó unos costes asociados a los ingresos de 4,567 millones de dólares, un 18.2% más. Al tiempo que los gastos de venta, generales y administrativos se situaron en 655 millones de dólares, lo que supone un incremento de 5.5%
De esta forma, la empresa obtuvo un resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado de 782 millones de dólares. Es decir, 25.1% superior a su resultado de los primeros tres meses de 2022.
“Continuamos creyendo que el actual entorno permanece siendo único por el ciclo de gasto, que es más duradero y menos sensible a los altibajos de los precios de las materias primas. Además, otra característica notable de este ciclo es el giro al gas natural y su versión licuada”, compartió.
