El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que ya no hay concesiones para la explotación del petróleo ni para privatizar la industria eléctrica.
En la mañanera, López Obrador enfatizó que la política entreguista de las anteriores administraciones ya se terminó.
El primer mandatario recalcó que ya no se privatizan los bienes públicos, ni se otorgan este tipo de permisos para la explotación minera y petrolera.
“Ya no hay concesiones para la explotación del petróleo, no las hay para que se siga privatizando la industria eléctrica. La situación ya cambió”, validó.
Ya no hay concesiones para la explotación del petróleo, no hay concesiones para que se siga privatizando la industria eléctrica. Ya cambió: @lopezobrador_. pic.twitter.com/wrrqoNbb5c
— SENER México (@SENER_mx) June 22, 2023
Postura oficial
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha reafirmado su posición contra la concesión de nuevos permisos para la explotación petrolera y la privatización de la industria eléctrica en México. Esta postura marca una clara discontinuidad con las políticas de administraciones previas, señalando un cambio significativo en la dirección del sector energético del país. López Obrador ha enfatizado que la era de las políticas entreguistas ha concluido, marcando el fin de la privatización de bienes públicos y el otorgamiento de permisos para la explotación minera y petrolera.
Paralelamente, López Obrador ha propuesto una reforma a la Ley Minera, cuyo objetivo principal es recuperar la rectoría del Estado sobre los recursos minerales e hídricos del país. Esta reforma pretende modificar el estado de las concesiones mineras para empresas del sector privado, impactando diversas disposiciones legales como la Ley de Aguas Nacionales y la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente. La propuesta incluye cambios significativos, como la eliminación del carácter preferente de la actividad minera, la reducción del período de prórroga de las concesiones de 50 a 15 años, y la introducción de concursos públicos para el otorgamiento de nuevas concesiones. Además, se plantea la posibilidad de imponer sanciones severas a quienes no cumplan con las nuevas medidas, incluyendo penas de prisión y multas significativas.
Reforma Petrolera
En el ámbito petrolero, López Obrador ha presentado también una reforma petrolera dirigida a fortalecer a Pemex, la empresa estatal de petróleo, y facilitar la suspensión de permisos. Este movimiento se alinea con su visión de fortalecer las empresas estatales y garantizar la soberanía energética del país.
Estas acciones del presidente López Obrador han generado reacciones variadas, especialmente en el sector empresarial y entre los inversionistas, quienes ven con preocupación los potenciales impactos en la inversión y en la confianza empresarial hacia México. La reforma minera, en particular, ha sido criticada por la Cámara Minera de México (Camimex), que advierte sobre las consecuencias negativas que podría tener en la inversión y en la generación de empleo en el sector, así como en la capacidad del país para atraer nuevos proyectos mineros debido a los cambios en los términos de las concesiones.
Estas medidas reflejan el compromiso del presidente López Obrador con una visión de soberanía y control estatal sobre los recursos naturales y sectores estratégicos de la economía, marcando un cambio de paradigma respecto a las políticas de liberalización y privatización de décadas anteriores.
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