La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó que durante su segundo año de gobierno se fortalecerán las obras de infraestructura, incluyendo en el segmento energético, y se mantendrán los programas sociales de bienestar, pilares de su administración. Además, anticipó que México alcanzará buenos acuerdos comerciales con Estados Unidos, Canadá, Europa, China y otras economías asiáticas, lo que generará certidumbre para la inversión.
En conferencia de prensa matutina, la mandataria subrayó que hay un programa de obras estratégicas para este sexenio y ahí está incluida infraestructura en energía.
Agregó que no habrá cambios en el modelo económico, reafirmando su compromiso con los principios del Humanismo Mexicano y la Economía Moral, bases ideológicas de la Cuarta Transformación.
“Primero es el modelo económico, ahí no va a haber cambios. Estamos convencidos del Humanismo Mexicano, de la Cuarta Transformación, de que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre y de que ‘por el bien de todos, primero los pobres’”, expresó Sheinbaum.
La presidenta detalló que el gobierno federal impulsará un programa integral de obras estratégicas, que incluye trenes de pasajeros, carreteras, puertos, aeropuertos, proyectos de agua y saneamiento, además de inversiones en los sectores energético, petrolero y eléctrico. Destacó que las empresas privadas participan en 46% de la generación eléctrica nacional, lo que refleja un esquema de colaboración público-privada para garantizar el suministro y fortalecer la infraestructura del país.
Asimismo, Sheinbaum señaló que, como parte del Plan México, su administración busca fortalecer la producción nacional tanto para el mercado interno como para la exportación, con el fin de consolidar el desarrollo industrial y aprovechar los beneficios del nearshoring.
“Vamos a tener un buen acuerdo y eso va a dar mucha certidumbre para la inversión el próximo año”, añadió la mandataria.
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Con estas acciones, el gobierno federal pretende mantener la estabilidad económica y social, garantizar la continuidad de los proyectos estratégicos e impulsar una política exterior económica más activa, orientada a la cooperación y el desarrollo sostenible.
