En agosto de 2025, Petróleos Mexicanos (Pemex) exportó un promedio de 500,203 barriles diarios (bd) de crudo, lo que representó una caída del 32% respecto al mismo mes del año pasado. De acuerdo con la empresa estatal, la disminución responde al mayor procesamiento de crudo en las refinerías nacionales, en concordancia con la estrategia gubernamental de reducir la dependencia de combustibles importados.
Durante el mismo periodo, las siete refinerías de Pemex procesaron poco más de 1.05 millones de barriles diarios, cifra superior al mes anterior. Este repunte en la actividad de refinación se tradujo en menor disponibilidad de crudo para exportación.
No obstante, la producción total de crudo y condensados se mantuvo en 1.64 millones de barriles diarios, nivel estable en los últimos meses pero inferior al registrado en agosto de 2024. La estatal petrolera enfrenta limitaciones presupuestarias y una elevada carga financiera, lo que ha frenado sus planes de expansión y modernización, pese a los intentos por reactivar campos maduros en el Golfo de México.
Las proyecciones apuntan a que las exportaciones continuarán descendiendo: en 2026 se estiman en 487,900 bd y para la próxima década en torno a 393,100 bd, en línea con el plan de autosuficiencia energética.
El gobierno de Claudia Sheinbaum mantiene la meta de elevar la producción a 1.8 millones de bd, aunque persisten retos técnicos, particularmente la dificultad de procesar crudo Maya en las refinerías del país.
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En paralelo, las importaciones de petrolíferos sumaron 457,849 bd en agosto, con una caída mensual de 19% y anual de 38%. La producción nacional de combustibles alcanzó 1.07 millones de bd, 4% más que en 2024, aunque ligeramente por debajo de julio.
