El precio de la mezcla mexicana de exportación se desplomó este lunes, en línea con la caída de los precios del petróleo, al regresar al primer plano las preocupaciones por un rebrote del Covid-19.
En los mercados internacionales, los precios del petrolero perdieron más de ocho dólares, después de que el centro financiero chino de Shanghái activó un confinamiento. Lo anterior, con el objetivo de frenar un aumento de contagios por Covid-19 en esa ciudad.
Shanghái inició un confinamiento en dos fases de 26 millones de personas, en un intento por frenar la propagación del Covid-19. Al respecto, las autoridades cerraron puentes y túneles y restringieron el tráfico por carretera.
El fantasma de la pandemia ha dejado en segundo plano, temporalmente, el efecto de la invasión de Rusia a Ucrania. Los mercados temen que un prolongado conflicto entre las dos naciones podría generar una escaces de hidrocarburos en Europa. Rusia es el segundo mayor exportador de petróleo del mundo y, por mucho, el primer suministrador de gas de Europa.
En este contexto, de acuerdo con Pemex, el precio de la mezcla mexicana de exportación retrocedió 7.91 dólares, es decir, 7.12%, para cerrar en 103.04 dólares el barril.
El 8 de marzo, la mezcla cerró en 119.62 dólares por barril, su precio más alto desde julio de 2008. En lo que va del año, el insumo acumula una ganancia de 45% frente al precio de 71.29 dólares registrado al cierre de 2021.
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En el mercado de Londres, el crudo Brent perdió 8.17 dólares, es decir, 6.8% para cerrar en 112.48 dólares por barril. El 8 de marzo, el crudo Brent escaló hasta 139 dólares, su mayor precio desde 2008.
Mientras en Nueva York, el crudo WTI perdió 7.54 dólares, es decir, 7%, para concluir en 105.96 dólares por barril. Hace dos semanas, el crudo texano cerró en 123.70 dólares, también su precio más alto desde 2008.
Desde que comenzó la invasión, los analistas estiman que los precios del petróleo podrían estabilizarse sobre los 100 dólares. Algunos especialistas consideran que los precios podrían escalar hasta 150 dólares por barril.
Adicionalmente, Rystad Energy estimó que el crudo Brent podría llegar a 240 dólares en este verano si los países continúan sancionando las importaciones rusas. Vladimir Putin fue más allá y advirtió que el petróleo podría escalar hasta 300 dólares.
