Ulises Hernández Romano, director general de PMI, resaltó que Pemex avanza en su estrategia de refinación para reducir su dependencia por la importación de combustibles. Este plan está en línea con el aumento de la producción nacional de hidrocarburos y la reactivación del Sistema Nacional de Refinación.
En el marco de la decimoquinta edición de Congreso Mexicano del Petróleo (CMP) y durante la presentación de su Conferencia Plenaria: “La comercialización del crudo mexicano en el mercado internaciona”, el encargado de dirigir la filial de Pemex en el comercio internacional, apuntó que la empresa productiva del Estado busca alcanzar una meta de 2 millones de barriles diarios a finales de la actual administración. Actualmente esta cifra oscila en 1.6 millones.
Asimismo, el director general de PMI señaló que cuando se acerque la meta de producción de la petrolera mexicana; el proceso de crudo alcanzará un nivel superior al millón y medio en 2023, en el Sistema Nacional de Refinación.
Datos del Sistema de Información Energética (SIE) de la Secretaría de Energía muestran que, entre enero y septiembre de este año, el procesamiento alcanzó los 702 mil barriles por día. Esta cifra es 18.5% superior al promedio del año pasado, sin embargo, el nivel representa sólo el 44% de la capacidad total nacional.
Cabe destacar que, la actual administración federal, ha destinado más de 33 mil 581 millones de pesos en la rehabilitación y modernización de las seis refinerías del país.
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Hernández Romano refirió que la meta de refinación se alcanzará en conjunto con el apoyo de las seis refinerías existentes. En ello, contribuirán también la nueva refinería de Pemex en Dos Bocas y la reciente adquisición de la refinería Deer Park en Texas.
Expuso que de las seis refinerías —Madero, Cadereyta, Minatitlán, Tula, Salamanca y Salina Cruz-, sólo tres cuentan con planta coquizadora, la cual procesa, a partir de combustóleo, productos de hidrocarburos ligeros como diésel y turbosina.
Al respecto, Hernández Romano señaló que una vez que esté lista la refinería de Dos Bocas, Pemex contará con una planta coquizadora más. En conjunto con la de Tula, estas instalaciones contribuirán en aumentar la capacidad de refinación de combustibles del país.
